La marca La Guita tiene su origen en una anécdota de su fundador, Domingo Pérez Marín.
Cuando alguien se acercaba a comprar manzanilla a la bodega, éste siempre preguntaba: ¿Tienes guita?, refiriéndose a si el comprador traía el dinero.

De este modo, y con el paso del tiempo, la gente comenzó a llamar a la bodega... (+)